GIOVANNI JIMÉNEZ ARREOLA
DIRECTOR EN LUNA LLENA ARTES ESCÉNICAS
PRIMERA LLAMADA
Conozco a un inquieto muchacho, actor de teatro, soñador y de peculiar carisma… MICHAEL SANTINO me presenta a…
SEGUNDA LLAMADA
Joven productora, profesional, trabajadora y de personalidad seria que inspira confiar en sus puestas… ERIKA GUARDADO es mi nexo para conocer a…
TERCERA LLAMADA
Joven y amigable muchacho que a simple vista se nota vive en dos mundos paralelos: la realidad y su mundo interior… un artista del cual aprenderé que los hermanos de otros padres también existen… él es GIOVANNI JIMÉNEZ.
EL CURRÍCULUM OBLIGADO
Giovanni Jiménez Arreola está enrolado en el quehacer escénico desde hace 13 años más o menos. En las Artes un poco más, tal vez toda la vida, estudió Diseño y Comunicación Visual en la antes llamada Escuela Nacional de Artes Plásticas, especializado en Ilustración, le sabe a la Fotografía y Caracterización, y ha realizado actividades diversas en distintas áreas de la Producción Teatral (Maquillaje, publicidad, escenografía, iluminación, etc.) le gustan las palabras y cometió la osadía de escribir libretos para después convertirlos en montajes.
EL TEATRO COMO MISIÓN DE LUNA LLENA
LUNA Llena Artes Escénicas lleva existiendo 10 años y meses, pues nació en el 2005, creada en conjunto con Erika Guardado (Productora), tomamos como valores, PROFESIONALISMO, HUMILDAD y TRABAJO constante.
Quisimos comprometernos a hacer un buen trabajo en la medida de nuestras posibilidades, pues nosotros mismos lo sustentamos y aportamos los recursos.
El compromiso para el buen trabajo es el de expandir la enfermedad del Teatro al Espectador, hacerlo adicto a él, iniciamos haciendo TEATRO DIDÁCTICO, teatro dirigido a niños y adolescentes, y desde ese punto es donde deseamos iniciar el contagio, esos PEQUEÑOS ESPECTADORES que verían los montajes se convertirían después en personas mayores, adultos y adolescentes que queremos ver en la sala después por el puro placer de ver Teatro.
Trabajamos en mayor medida en la zona sur de la Ciudad y Xochimilco se convirtió en nuestra casa, tenemos un TALLER DE FORMACIÓN ACTORAL en el Teatro Carlos Pellicer de Xochimilco desde hace 8 años aproximadamente.
Conocerlo tras bambalinas fue interesante. Más callado de parlanchín. Respetuoso y (ya con el trato) de una ternura que parece inagotable, Giovanni Jiménez ha sembrado, más que construido, su camino por las páginas del teatro independiente mexicano.
Al proponerle esta semblanza, él… con su entusiasmo de siempre, aceptó sin peros y yo, impaciente en stand bye, esperé paciente sus respuestas al breve cuestionario personal, escrito especialmente para él…
…
…..
Esperé… y esperé… y cuando recibí las respuestas, fue recompensado con creces ese tiempo que pasé escribiendo de otros amigos igual de entrañables, aunque él… GIO lo haya adoptado como mi hermanito hace ya no pocos años… adoptarlo así, como hermano y sin preguntarle y, como nunca recibí una negativa, mi corazón estaba feliz porque ahora tenía un hermanito menor hecho en el corazón.
En las propias palabras de Giovanni, mismas que se expanden y se apropian en el papel, explotando en el escenario como bombas de tiempo que anidan en las emociones de los espectadores, he de dejar que lo conozcan.
No es muy necesaria mi intervención como escritora, así que, a continuación, queda íntegra la entrevista que el propio Giovanni Jiménez se encargó de responder:
¿Para qué te sirve hacer teatro?
Para lo que le serviría a cualquiera, hacer Teatro da una sensación de bienestar y eso es lo que puede sentir un Espectador receptivo.
A mí, el Teatro me ayudó a conjuntar todas las cosas que he tenido suerte de aprender en mi formación académica y autodidacta, se convirtió en el resultado de la mezcla de todo, de manera que me sirve para extender mi visión sobre el mundo y la vida, pues de la vida misma y el hombre mismo es de lo que el Teatro está hecho.
Siempre aprendo, nunca dejo de hacerlo; en el escenario podrías encontrar la respuesta a preguntas que antes te habías hecho y las preguntas a respuestas que ya conoces pero que no entendías.
¿Para qué le sirves al Teatro?
Se convirtió en una necesidad, un deseo continuo y una manera de ganarse el pan (oh si, el Arte ayuda a ganarte el pan)
Le sirvo para satisfacer ese deseo de decir cosas que no logras decirle a todo el mundo, siempre hay un lenguaje entre líneas en un texto dramático, un mensaje que quieres dar a conocer a otro grupo de mujeres y hombres que estarán en la sala, es como convertirte en un esclavo con todo el gusto del mundo, pues como muchas cosas, exige y exige energía, tiempo, trabajo y disciplina, ahí es donde se quiebran muchos Artistas, sin disciplina no logras lo que quieres.
El talento es importante, pero todo el mundo tiene un talento, todo el mundo tiene la posibilidad de hacer Arte, si le agregas disciplina a eso, entonces el talento se potencializa y explota más fuerte, es más expansivo.
No soy más que una persona como cualquiera con quienes colaboro, otro hilo conductor de lo que el Teatro quiere ser y decir.
Si el Teatro me dice: “No me sirves para nada” me asustaría.
¿Actuar o dirigir?
La sensación de pisar el escenario es incomparable, dejarte llevar y prestar tu ser a un personaje es en sí, una experiencia que parecería un viaje astral.
Sin embargo, algo similar se siente al estar del otro lado del escenario, es también una experiencia astral, dirigir un montaje es como realizar una pintura, modelar o esculpir.
Tratar de poner en sintonía y sincronizar todos los elementos que dan vida a un montaje se convirtió para mí en una experiencia más emocionante, pues me permito ser espectador continuo de la evolución de mis compañeros y amigos actores, no es sencillo, pero se disfruta mucho.
Además en la Dirección también debes incluir creatividad, catarsis, comunicación, sintetizar ideas, abrir los ojos y conocer y reconocer a todos los actores que trabajan contigo, es una labor disfrutable.
En concreto prefiero dirigir, seguro es porque no soy muy buen actor (también se dice eso de los directores… lo escuché por ahí… )
¿Tu mejor trabajo como dramaturgo?
Pues, no está tan sencillo responder eso, y es que luego colocarse títulos nos hiere muchas sensibilidades, pero sin ofender a amigos y compañeros dramaturgos, tengo mucho cariño por El brillo de los diamantes, un trabajo que iniciamos con coraje y que se convirtió en nuestro machete para abrir paso entre la maleza y avanzar. Escribir además te da herramientas para conversar con los autores de las obras que decides hacer y tener alguna buena justificación para así realizar algún cambio en su texto o algún ajuste que pudiera ser necesario por la manera en que la historia puede ser contada.
La experiencia y el ejercicio de la escritura va aumentando con el tiempo, así que por lo pronto creo que El cronoscopio (el último texto que decidí escribir) es el que creo que está más trabajado.
¿Tu mayor cómplice?
Todos quienes desean hacer algún trabajo junto a mí lo son, sin complicidad no lograríamos hacer la travesura, todos en el mismo canal, todos con el mismo objetivo, contar una historia y tocar alguna fibra emocional y de conciencia al Espectador.
Pero alguien que nunca ha dicho que no, a menos que sea una locura realizarlo, es Erika Guardado, mi esposa. Ella siempre ha dicho que sí y, ya con eso, siento en LUNA llena el 80% del camino ganado.
¿TU SUEÑO AÚN NO CUMPLIDO EN EL ESCENARIO?
El próximo montaje a realizar es mi sueño aún no cumplido, trato de expandir mi universo con cada montaje.
En otros términos, siempre he querido ser comparsa o extra en una escena épica y correr como loco con una espada en la mano y gritar: “¡Si, vamos a darles!”
NO TE PIERDAS DEL TRABAJO Y LAS APUESTAS TEATRALES DE GIOVANNI JIMÉNEZ…
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…y así, como Gio lo dice, en esta ocasión sólo soy el hilo conductor de una entrevista que nunca tuvo lugar de frente, pero que entre gente que habla de la verdad del arte, sólo es necesaria la mirada de la palabra.
¡ENHORABUENA HERMANITO!
…a seguir sembrando en el corazón y las emociones de los espectadores, que la cosecha siempre será buena viniendo de ese sembrador de palabras y contador de historias en que te has convertido.
ELIZABETH LLANOS